La joven promesa sanantonina que entrega interesantes datos astronómicos en redes sociales
Simón Hernández, alumno del Liceo Nacional de Llolleo, suma 1.200 seguidores en poco más de un mes en sus redes, en donde traspasa conocimientos astronómicos para todos.
Simón Hernández Silva, un niño de 12 años de San Antonio, encontró en un telescopio el regalo que le cambiaría la vida. Fue en una noche de Navidad cuando sus padres decidieron obsequiarle aquel instrumento, sin imaginar que despertaría en él una profunda pasión por la astronomía. Desde esa noche, comenzó para él un viaje de exploración científica y autodidacta que lo ha llevado a destacarse en este ámbito.
Motivado por su curiosidad, el joven ha participado en talleres, congresos y competencias científicas donde ha presentado investigaciones sobre astronomía. Su dedicación le ha valido reconocimientos por la calidad de sus trabajos, lo que lo ha posicionado como una promesa en el estudio del cosmos.
Con el objetivo de compartir su amor por el universo, recientemente abrió una cuenta de Instagram (@simon_cosmodatos) para difundir contenido relacionado con la astronomía. A través de videos e imágenes con explicaciones sobre fenómenos astronómicos, Simón ha comenzado a captar la atención de seguidores interesados en aprender más sobre el tema. Su perfil se ha convertido en una ventana para acercar la ciencia a jóvenes y adultos, combinando datos con un lenguaje accesible.
El entusiasmo de Simón por la astronomía sigue en aumento, y su mirada ya está puesta en el futuro. Con el apoyo de su familia, continúa adquiriendo nuevos conocimientos sobre la astronomía y se prepara para un viaje a un observatorio. Su historia demuestra cómo un regalo puede despertar vocaciones, y abrir caminos hacia el conocimiento para inspirar a los demás a mirar al cielo con curiosidad y asombro.
Sus inicios
Antes que la astronomía llegara a su vida, Simón pasaba su tiempo libre entre el básquetbol y sus amigos virtuales. Cuando llegó aquella mágica noche de Navidad, no pidió un regalo en específico, pero una sorpresa aguardaba para él a medianoche. "En la Navidad del 2023 me regalaron un telescopio. Fue una sorpresa. Mi interés creció en ese momento pero antes me sorprendía mirar la Luna. Antes de tener un telescopio no la había visto, pero mi mamá sí", recalca.
Al día siguiente, tras abrir el regalo, "lo armamos. Ese mismo día en la mañana lo armamos entre los tres (con sus padres) viendo un tutorial, y nos demoramos una hora".
Para Simón, su primera noche de observación con el telescopio fue inolvidable, y detalló en un cuaderno lo que iba descubriendo. "Esos primeros días yo iba notando qué pasaba con la Luna. Estaba metido viendo la Luna. Yo iba anotando, por ejemplo, día uno: a la Luna se le vieron todos los cráteres. Día dos: no se vio mucho hoy día. Iba anotando. Pero esa primera noche fue hermosa, fue un buen sentimiento porque era como ver algo tan lejos, muy cerca", precisa.
En medio de la entrevista, la madre de Simón, Sulamita Silva, añade una historia que tiene que ver con la decisión de regalarle un telescopio en esa noche, y no otra cosa. "Antes, él le sacaba la foto a la Luna cuando se veía tan linda, pero era como sacarle una foto a una ampolleta. Y yo siempre le contaba que cuando chica, yo había visto la Luna en un telescopio, y era tan bonita, tan linda. Simón nunca pide nada para Navidad. Y ahí yo decía que un regalo lindo sería un telescopio", afirma.
Desde ese día en adelante, se hizo habitual en la casa de Simón que él pasara largas jornadas nocturnas en su balcón, descubriendo planetas como Júpiter, Venus y Marte.
Competencia
Impulsado por la curiosidad y su telescopio, Simón comenzó como autodidacta antes de unirse al Parque de la Ciencia en Santo Domingo para ampliar sus conocimientos. "Me lo recomendaron. El primer día estaba nervioso, y después nos empezamos a conocer más entre los niños en el taller de astronomía. Allí nos enseñaron lo básico, lo fundamental para poder ejercer en la astronomía", relata.
Al poco tiempo después conoció a Liseth y Justin, dos jóvenes que también son del Parque de la Ciencia. "Con ellos hablábamos de cosas que nos gustaban, de la astronomía. Todos teníamos gustos parecidos", manifiesta.
Primer lugar
En medio de este proceso, nació la idea de participar en el Congreso Astronómico Escolar, el cual es impulsado por la Universidad de Concepción, específicamente por el Departamento de Astronomía, y por el Núcleo Milenio Titans. "Hablé con el profesor Jaime Giannelloni y me dijo que había un concurso para exponer un proyecto. Me dijo que buscáramos a alguien de mi colegio, el Liceo Nacional de Llolleo, pero no se pudo. Entonces buscaron a alguien del parque, y ahí ingresaron Justin y Liseth. El profesor nos fue reclutando".
De un total de 50 postulaciones, solo 12 proyectos fueron seleccionados, entre ellos "Huellas de impacto: análisis y medición de cráteres lunares", presentado por Simón y su equipo. El trabajo consistió en analizar 10 cráteres lunares, midiendo su diámetro, perímetro, área y profundidad con diversas herramientas. La preparación fue exigente, ya que debieron exponer durante 10 minutos y responder preguntas por otros cinco.
"Estudiamos. El profesor nos preparó. Nos preparó con preguntas y nos decía qué nos faltaba. Por ejemplo, días antes a mí me costaba explicar la hipótesis. Había unos datos que se me complicaban aún, y también cuando estaba frente al profesor, me ponía nervioso. Cuando viajé a Concepción me puse muy nervioso, todo el camino se me hizo eterno", confiesa.
Tras la presentación en noviembre pasado, el equipo logró el primer lugar y por esto es que deberán viajar este año al Observatorio de Las Campanas como premio. "En ese momento me gustaría disfrutar y enfocar una nebulosa. Ojalá nos permitan enfocar una nebulosa", reflexiona.
Sin embargo, lo que más le gustaría es "grabar para mi canal", es decir, para su Instagram, que abrió a fines del año pasado, y que ya suma más de 1.200 seguidores.
Simón Cosmodatos
Luego de la victoria de su equipo en la Universidad de Concepción, Simón decidió dar un paso hacia un sueño personal: abrir una cuenta de Instagram dedicada a la divulgación de la astronomía. Inspirado por la experiencia vivida, que lo dejó profundamente fascinado, sintió el impulso de compartir su pasión por el universo y acercar el conocimiento científico a un público más amplio mediante datos.
"En cierto modo, yo varias veces intenté crear mi canal de YouTube porque me gusta mostrar lo que hago, y de ese modo se me ocurrió. Elegí Instagram porque yo siempre veía cómo los grandes astrónomos tienen canales de Instagram súper grandes, y yo dije 'me quiero basar en eso'. Y el nombre se me ocurrió porque dije que se tenía que llamar Simón, y que el canal tenía que tener datos. Y ahí me dije: le voy a poner Simón Cosmodatos", explica.
Entre los primeros videos que subió a su red social resalta uno donde explica el Big Bang, es decir, una teoría de cómo se originó el universo, además de otro relacionado con la formación de la Luna. "En las redes sociales todos me comentan cosas buenas, y mi mamá me ayuda también. Lo que yo publico lo investigo o leo datos de los libros", aclara.
Esta iniciativa está fuertemente vinculada con lo que a futuro le gustaría realizar. "Quiero estudiar astronomía en la Universidad de Concepción. Hay astrónomos que investigan tal cosa, hay varios temas. Por ejemplo, cuando fuimos a Concepción había una astrónoma que se dedicaba a investigar la masa que hay dentro de un agujero negro, ella se especializa en eso. Pero a mí me interesaría más ser un divulgador", manifiesta.
Sus próximos planes son "seguir yendo a charlas de astrónomos, a firma de libros", mientras que con sus redes sociales le gustaría "explicar no tan serio, sino como entretenido, explicar qué pasaría si el sol se apagara o explotara", subraya.
-¿Qué dato astronómico no debiera olvidar nunca un habitante de San Antonio?
-La importancia de la Luna con el mar. La Luna va dirigiendo las mareas, la marea alta, la marea baja. Y pienso que eso sería muy importante porque se tiene que saber la importancia de la Luna con el mar.
"Pero esa primera noche (que vio la Luna a través del telescopio) fue hermosa, fue un buen sentimiento porque era como ver algo tan lejos, muy cerca",
Simón Hernández
"Quiero estudiar astronomía en la Universidad de Concepción. Hay astrónomos que investigan tal cosa, hay varios temas",
Simón Hernández