Preso quedó adolescente que apuñaló cinco veces a su papá en Cartagena
El imputado, de 17 años, fue detenido por Carabineros y formalizado por parricidio frustrado. Tenía una orden de alejamiento de su padre.
Cuando terminaba su jornada de venta de helados en la Playa Chica de Cartagena, un hombre de 41 años estuvo cerca de perder la vida. Y nada menos que a manos de su propio hijo adolescente.
Eran las 18.40 horas cuando la víctima se acercó al paradero de micros para trasladarse a San Antonio, donde reside, cuando sintió que le pegaron un combo por la espalda. Según su relato, al voltear vio a la actual pareja de su "ex", quien quiso volver a golpearlo.
El afectado declaró ante la policía -testimonio al que accedió Diario El Líder- que en ese instante apareció su hijo. "Se me tira con un cuchillo en la mano y me apuñaló reiteradas oportunidades, diciendo 'te voy a matar perro ctm'. Siempre que me ve, me agrede", indicó.
Así, en pleno borde costero de Cartagena, que estaba atiborrado de transeúntes, el afectado cayó al suelo cubierto de sangre tras recibir cinco puñaladas. El joven agresor, en tanto, detuvo su actuar porque carabineros que se encontraban patrullando cerca del lugar vieron la escena e intervinieron rápidamente.
La fiscal Javiera Vargas detalló que uno de los funcionarios policiales que estuvo en el lugar declaró que "se encontraban efectuando labores preventivas cuando ven a un sujeto que había sufrido puñaladas y le ordenan (al adolescente) que botara el arma. Dice que si no llegan, el imputado hubiese seguido propinándole puñaladas y ocasionado la muerte".
En el lugar el lesionado sangraba profusamente, ya que "mantenía una evidente pérdida de sangre, por lo que tuvimos que hacer presión en las heridas para parar el sangrado mientras llegaba personal médico", aportó el uniformado sobre lo sucedido.
En medio de la conmoción que generó el suceso en la Playa Chica, los carabineros detuvieron al menor de edad y a su padrastro de 36 años por las lesiones provocadas a la víctima.
El herido fue trasladado al consultorio de Cartagena y luego al hospital Claudio Vicuña.
Parricidio
En el Juzgado de Garantía de San Antonio, la fiscal Javiera Vargas formalizó al adolescente por el delito de parricidio frustrado y desacato.
Esto último porque ya había sido arrestado por otro hecho de violencia intrafamiliar en que también agredió a su papá. Aquella vez le comunicaron cargos por las lesiones contra su progenitor, instancia en que el juzgado le ordenó la prohibición de acercarse a su papá, lo que incumplió.
Frente al violento ataque, la fiscal solicitó que el joven fuera puesto en internación provisoria por ser un peligro para la víctima y para la sociedad. "Es un hecho que ocurre a plena luz del día en la costanera, lugar sumamente concurrido, en que intenta matar a su padre, además hay un desacato", expresó la abogada del Ministerio Público.
La persecutora presentó en la audiencia el dato de urgencia sobre las lesiones por arma blanca sufridas por la víctima en los brazos, hombros y en la zona pectoral, como también un informe de la Brigada de Homicidios, que quedó a cargo de las pesquisas.
Al adulto detenido lo formalizaron por lesiones contra el mismo afectado.
El comisario de Cartagena, capitán Emilio Matheu, informó que en el procedimiento se logró la recuperación del arma blanca usada por el joven, que es una cortaplumas de 20 centímetros.
Defensa
El defensor particular del adolescente, Héctor González, argumentó en el tribunal que el imputado actuó de esa manera luego de una presunta vida de maltratos por parte de su padre y que las heridas que le ocasionó no lo dejaron en riesgo vital, por lo que habría incurrido en el delito de lesiones, no en parricidio frustrado.
"No fueron heridas que puedan entenderse que actuó para quitarle la vida", afirmó el abogado.
El juez Álvaro Arriagada no estuvo de acuerdo. Analizó que existían antecedentes suficientes para que se acreditara el delito de parricidio frustrado y desacato, como también la autoría del menor de edad en la agresión.
Así ordenó que el joven fuera enviado a un centro cerrado de Mejor Niñez en internación provisoria.
El coimputado, identificado con las iniciales S.F.C.B., quedó en libertad con la medida de prohibición de acercarse a la víctima.
"Mantenía una evidente pérdida de sangre, por lo que tuvimos que hacer presión en las heridas para parar el sangrado mientras llegaba personal médico",
declaración de carabinero que ayudó al lesionado.
41 años tiene el hombre que recibió las múltiples puñaladas a manos de su hijo adolescente.