La profesora sanantonina que a los 75 años no pierde la vocación por enseñar
Con casi sesenta años de carrera docente, Inelia Fuentes Herrera, presidenta de la agrupación "Profesores por Siempre", no solo dejó una marca en el aula, sino que continúa transformando vidas a través de su compromiso con la educación.
Nacida en Santiago, Inelia Fuentes Herrera (75) creció en un entorno donde la educación era altamente valorada. Mientras sus hermanos mayores cursaban carreras universitarias, ella decidió seguir su verdadera vocación: la docencia.
Desde pequeña, soñaba con enseñar, lo que la llevó a estudiar en la Escuela Normal N°1 de Santiago, donde se formó como profesora de educación primaria urbana con mención en Artes. Su primera experiencia como docente fue en San Fernando, en una escuela rural. "Allí, encontré no solo el cariño de los niños, sino también el apoyo de una comunidad que valoraba mi entrega", asegura.
Pilares educativos
La música y la lectura siempre fueron fundamentales en su vida. Durante su infancia en un colegio religioso, aprendió a recitar, leer y valorar las letras, habilidades que más tarde transmitió a sus alumnos. Su talento musical se reflejó en cada escuela donde trabajó, desde San Fernando hasta San Antonio, adonde se mudó en 1979 junto a su esposo, Óscar Tejos, también profesor.
En San Antonio, Inelia se consolidó como educadora destacada. Inició su labor en la escuela 461 de Mujeres, conocida hoy como el Grupo Escolar, donde impulsó la música coral y la enseñanza de la flauta dulce.
También colaboró en el colegio Sara Cruchaga, dejando una huella profunda en sus estudiantes. "Todavía me encuentro con muchas niñas que fueron mis alumnas y me saludan con cariño. Eso es lo que más valoro de mi carrera: el amor y el respeto que sembré", dice emocionada.
Liderazgo
A lo largo de su carrera, Inelia asumió diversos roles de liderazgo. Tras obtener una mención en artes plásticas, participó en exposiciones de arte y ocupó cargos como jefa técnica y directora de instituciones emblemáticas, como la escuela Sor Teresa de Los Andes (Grupo Escolar) y la escuela España. .
A los 60 años, Inelia decidió jubilarse, pero su amor por la enseñanza la llevó a unirse en 2013 al club de adulto mayor "Profesores por Siempre". Esta agrupación, fundada por la destacada profesora Mirella Espinoza Cerda, quien falleció recientemente, reúne a antiguos docentes comprometidos con la educación.
Pronto, Inelia asumió la presidencia del grupo y lideró iniciativas para apoyar a escuelas vulnerables mediante la entrega de útiles escolares, libros de cuentos y material deportivo. Hoy está comenzando su cuarto periodo en este cargo.
En San Antonio, uno de los proyectos más significativos de su gestión fue la creación de un libro de poesía para estudiantes de primero y segundo básico, financiado por la Fundación San Antonio Siglo XXI. Esta publicación incluye poemas y actividades diseñadas para fomentar la creatividad y la comprensión en los niños. "Queremos que los más pequeños vuelvan a recitar, a hablar, a conectarse con el lenguaje de una manera profunda. La poesía es una herramienta poderosa para construir autoestima y valores", reflexiona.
Docentes activos
La agrupación "Profesores por Siempre" está compuesta por 21 miembros, cuyas edades oscilan entre los 66 y 84 años. Se reúnen mensualmente en el Grupo Escolar y mantienen un constante intercambio de ideas y proyectos a través de un grupo de WhatsApp. "Es una comunidad basada en el respeto y el cariño. Nos cuidamos mutuamente y trabajamos por dejar un legado que inspire a las próximas generaciones", destaca Inelia.
El grupo tiene ambiciosos planes, como recopilar refranes, dichos, leyendas y canciones populares para crear un nuevo libro que fomente el aprendizaje del lenguaje y las tradiciones culturales en las escuelas. También desean retomar sus viajes culturales, que combinaban actividades de bienestar personal con la entrega de materiales educativos en comunidades rurales. "Nuestro objetivo es seguir aportando a la educación, ya sea con libros, talleres o simples gestos de apoyo. Creemos firmemente que cada pequeño esfuerzo suma para cambiar vidas", asegura.
Agrega que "queremos rescatar las funciones del lenguaje: escuchar, hablar, leer y escribir. Son esenciales, y lamentablemente, cada vez están más relegadas en la era de las redes sociales".
Además de su trabajo en la agrupación, Inelia participa en el programa radial "San Antonio en la Memoria" de Radio Chilena. Allí, junto a otros miembros de la comunidad, no solo profesores, reflexionan sobre el pasado y el futuro de la educación, además de otros temas de interés.
Siempre con el apoyo de su hija Nathalie, tecnóloga médica, Inelia sigue trabajando por una educación más humana y valórica. "Hemos dedicado nuestra vida a enseñar, y mientras tengamos fuerzas, seguiremos construyendo un legado que inspire a las nuevas generaciones. Esa es nuestra misión, y no hay mayor recompensa que verla florecer en los niños", concluye.
"Todavía me encuentro con muchas niñas que fueron mis alumnas y me saludan con cariño. Eso es lo que más valoro de mi carrera: el amor y el respeto que sembré",
Inelia Fuentes